324. Cisne blanco cisne negro

Ayer fui a ver El Cisne Negro. Se que es una película polémica pero a mi me gustó mucho. La mayoría de las veces a uno le gustan las obras con las que empatiza y El Cisne Negro le dio forma a muchas reflexiones tantas veces meditadas, tantas veces compartidas sobre la ambigüedad de nuestro ser. Todos somos cisnes negros y cisnes blancos. Todos somos ambos, incluso al mismo momento. Y debemos aceptarlo, saberlo y reconciliarnos con ese otro cisne que convive en nosotros. Y en esa reconciliación hay que dejarlos aflorar. Let it be. El camino del control y la represión sólo lleva a la locura.

Comentarios

  1. Gracias por la reflexion. Era lo que estaba precisando para ir a verla. Ana

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